Comienza la aventura 2011. ¡ Primera parada Buenos Aires !

Enrique A. Arjona.// Nervios, sueño y mucha muchísima ilusión. Así es como empieza la aventura del Maicop 2010/2011 por su periplo americano. Desde nuestro mítico punto de encuentro en la plaza de Gabriel y Galán comenzaba el trayecto en bus hasta Madrid. Aquí las primeras risas y alguna cabeza de sueño anticipaban lo que iba a ser el larguísimo viaje de más de 30 horas al primero de nuestros destinos del próximo mes, la bellísima ciudad de Buenos Aires, casa de alguno de nuestros compañeros y anfitriones de honor.

Con todo el grupo reunido en el aeropuerto de la capital pasamos por el primero de los numerosos controles de seguridad (siempre por nuestra protección claro) que nos acecharían a lo largo de todo el viaje. El primer vuelo con escala en Miami se hizo algo más breves gracias a la simpática compañía de las azafatas y azafatos que entre broma y broma nos enseñaron algún que otro juego de magia y nos ofrecieron las delicias de la comida de avión.

Por supuesto, nuestra llegada a las costas de Florida, nos llevaría a descubrir brevemente los primeros rayitos del sol caribeño, pero también las temidas colas de control de aduanas. Sin embargo, los trucos de los miembros veteranos del equipo Maicop para sortearlas nos permitieron lograr la hazaña de traspasarlas en un tiempo record, y sin que nadie de los nuestros pasase al temido cuarto de interrogatorios del servicio de seguridad del Tío Sam.

Ya de camino a la capital argentina, el cansancio y el sueño se encargaron de que las horas se pasaran rápidamente en nuestro segundo y último vuelo. ¡Misión cumplida! ¡estábamos en Buenos en Aires! Pero no creáis que la cosa terminaba aquí. Como es propio de los maicoperos, lejos de querer descansar y tras dejar las maletas en el hotel, decidimos explorar la tierra que sería nuestro hogar durante los siguientes diez días.

El recorrido por las calles nos llevaría de paseo hasta el imponente parque de La Recoleta, a degustar los placeres de la carne argentina, a disfrutar de los tangos improvisados en la calle, o a conocer a la mismísima Wonderwoman que no dudaría en posar con nuestros colegas Juan Vázquez y Joaquim Posero. Sin duda, estos primeros pasos del viaje acertaban a deslumbrar que las buenas experiencias solo acababan de comenzar.

Con esto acaba el primer capítulo de nuestra travesía. Sólo déjenme darles un último consejo. Si el  director Jorge Santiago, les invita a dar un pequeño paseo, ¡no lo crean! Les espera un trayecto de 5 horas de intensa marcha. Eso sí, acompañado de buena conversación, las mejores vistas de la ciudad y la satisfacción de haber aprovechado el tiempo hasta el último momento.