Desde la Tribuna: La Roma contemporánea

Pablo Martín. //

Momento MAICOP

Hemos llegado a Roma, pero al mirar el mapa hemos descubierto que estábamos en América. Después de Miami, la monumentalidad de Washington nos impacta con contundencia: así debían sentirse los antiguos cuando llegaban a Roma, dice un maicopero. Ningún edificio es inocente, todos reflejan el enorme poder de esta nación, la grandeza de sus instituciones y el simbolismo como referente de Occidente. Aquí, entre estas piedras y columnas, arde la esencia del republicanismo y de la cultura occidental. Es una ciudad única, ilustrada, imperial e incluso esotérica. Aquí sólo pueden ocurrir grandes cosas, aquí habrá inolvidables momentos MAICOP.

MAICOP de Oro

Juan Vázquez: “¿Pero qué es eso del MAICOP de Oro?”, esta pregunta, con más de veinte días de viaje a la espalda, sólo puede salir de los labios de Juan, porque es entrañable, porque es inigualablemente gracioso y, sobre todo, porque vive en su propio mundo, a su propio ritmo. Es una persona que se hace notar: es gallego y lo demuestra en cada depende, es curioso y lo evidencia con sus preguntas a veces inescrutables y es una cómico como queda de manifiesto en cada broma y en cada acción inverosímil que desconcierta a cuantos estamos a su alrededor por su genialidad o por su atrevimiento. Hay cosas que sólo podría hacer Juan Vázquez, pero por suerte ha tardado veintitrés días en descubrir el MAICOP de Oro, pues si no se habría llevado más de la mitad de los premios.