Del gris al azul

Paula Villaverde. //

Un día gris puede ser azul. Son las nueve y media de la mañana y llegamos al desayuno con la noticia de la cancelación de nuestra aventura por aviso de inundación en Tigre. Entre caras de sueño y panecillos de desayuno intentamos buscar planes alternativos; todos reunidos decidimos aventurarnos e ir camino a la estación de Retiro para “coger” el tren camino a Tigre.

Una hora después llegamos a este pueblo costero donde brillaba el sol, contradiciendo todas las predicciones meteorológicas para este día. Comenzamos la excursión en el Delta de Tigre con un “tour turístico” en un barco de madera típico de la ciudad.

El paisaje se caracterizaba por casas coloniales y embarcaderos privados. Pudimos ver también el Museo Naval de Tigre y el Museo Sarmiento que es un museo popular que su conservación la lleva a cabo el Ayuntamiento.

Navegando por el Río Correpaxai, la guía nos explicaba que existían nueve secciones; la primera de ellas es la que contaba con más servicios como televisión satélite y demás. No obstante, a pesar de tener muchos servicios, no cuentan con agua potable o gas, el agua la tiene que traer envasada. Navegamos también por el Río Luján que desemboca en la Plata, y por el Río Tigre que está muy contaminado. La guía nos explicó que para la construcción de estas pequeñas viviendas comenzaron colocando piedras y barro.

Al terminar la visita guiada, nos apeamos del embarcadero rumbo al McDonalds. Estábamos disfrutando de nuestros Mcmenús cuando descubrimos que nuestro querido compañero Pablo nos confiesa ¡¡¡qué nunca había ido al McDonalds!!! Todos nos quedamos asombrados y envidiados de la buena alimentación que debe llevar en su vida…

Con el estómago lleno nos dispusimos a dar un paseo por el pueblo y conocer sus puestos de mercado típicos. Allí, los 11 maicoperos que fuimos, compramos recuerdos para nuestros familiares y amigos
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“Pateado” todo el Mercado de Frutos de Tigre decidimos acercarnos a la estación de tren para saber cual sería el próximo para volver a la que se ha convertido en nuestro hogar estos casi 10 días. Un día que comenzó siendo gris y acabó siendo azul.

Caiga quien Caiga… esta noche promete ser divertida.