Homenaje a Paco Martínez Soria

Pablo Martín. // 

Momento MAICOP

Nadie duda de que en este máster hay mucha gente sofisticada, preparada y cosmopolita, pero en Miami a veces es difícil no sentirse como Paco Martínez Soria. Paseamos por la Universidad de Miami abrumados por el asombro, como si de pronto hubiésemos aterrizado en otro planeta: sus jardines, el lago, la variedad de restaurantes, los grupos de estudiantes intentando recaudar fondos para sus hermandades y sobre todo la espectacular biblioteca, tan grande como una facultad de España.

Pero no hace falta acudir a ejemplos tan elevados para vislumbrar la mirada de Paco Martínez Soria en nuestros ojos. Admiramos los coches lujosos y quedamos cautivados por las mansiones de las celebridades, a algunos les falta juego en el cuello para poder observar todo lo que desean; otro se fija en otras bellezas: seguramente las dos hermosísimas rubias que se cruzaron con un divertido maicopero no olvidarán la mirada de sorpresa y la sonrisa embelesada de éste; y otros se quedan pasmados por las diferentes manifestaciones de la cultura estadounidense, tan sólo con vivir unos pocos días aquí ya puedes entender las raíces de la impresionante potencia económica de esta gran nación.

MAICOP de Oro

Nuno Cruz: el proyecto de viajar a Disney World parecía totalmente arrinconado, pero de pronto Nuno dijo que él sí que iba. Así es este portugués: no importa cuánto gire el mundo, si él no quiere girar, no se moverá. Su seguridad no tarda en expandirse y a lo largo del día va sumándose gente al viaje. Por su templanza, por su seguridad y por gozar de una de las mentes más afinadas y veloces de todo el máster.